A mí me llaman el tonto A mi mujer la tontona A mis hijos los tontitos Mi suegra la tontarrona A mí me llaman el chorro A mi mujer la chorrera A mis hijos los chorritos Mi suegra la regadera A mí me llaman el tiro A mi mujer la escopeta A mis hijos los cartuchos Y a mi suegra la baqueta Me gustan las santiagueñas Salteñas y tucumanas De los amigos que tengo Más me gustan sus hermanas Dos viejas collas lloraban Hincadas junto a un finao Pegaban cada alarido igual que puma enjaulao Al sentir los alaridos; el finao se enderezó Apagó las cuatro velas y el velorio se acabó No me caso con la viuda; no me caso ni machao Por no aprenderle las mañas que le enseñará el finao Me gustan las santiagueñas Salteñas y tucumanas De los amigos que tengo Más me gustan sus hermanas