No esperes nunca de mis labios un reproche Tampoco menos una queja de mi alma Yo olvidaré lo que pasó en aquella noche Y así hallaremos para los dos la calma No digas nada, que el mundo nada sepa A quien le puede importar lo que pasó Si a ti te agobia como a mí esta tristeza Culpa al destino como lo culpo yo Y a nuestras almas unirlas No es posible Si en nuestras vidas no existe La comprensión Es muy amargo luchar Con lo imposible Cuando se pierde la fe En el corazón (Piano bonito) No digas nada, resignate en silencio Ten la paciencia como la tengo yo Y al despedirme será el último beso Sello infalible de que todo terminó