Manos manchadas de gotas de café De vísperas, de encuentros y despedidas Piernas cansadas de mantenerme en pie Y lágrimas surcando tus mejillas ¿No sienta bien el sabor de la verdad? Cambio la luz por tenerte media vida Vuelve la noche, acechando con mis pesadillas Por más que duela olvidarte Por más que alimente la rabia no quiero elegir Pues somos los culpables de esta sucia masacre Cuando el dolor se acerque y mires las estrellas Acuérdate de contar calaveras Que sufrieron las noches difíciles De altos muros y profundos túneles Cuando el sudor invada tu piel Cambia tu rostro y vuelve a nacer Cuando el silencio rompa el ruido del miedo Siente que la puerta ya se abrió Por más que duela olvidarte Por más que alimente la rabia no quiero elegir Pues somos los culpables de esta sucia masacre