Alma nocturna, caprichosa, Insolente, en la ciudad, tanta libertad. Brillás como las estrellas, Como las luces de los autos al pasar. Alma nocturna, vanidosa, Que no puede estar en ningún lugar Que tenga cuatro paredes, no! Necesita respirar. Yo sé que estás dentro de mí Buscando siempre, siempre salir. En cualquier ciudad, en cualquier país, Vos me encontrás frente al espejo Y me vestís. Alma nocturna no me dejes, Que el sol va a quemar esta felicidad. Y vos vas contra la corriente, Brillás en la oscuridad. Cuando ya no me importe nada más Que sólo despertar Y sea feliz con nada, Y tenga todo en su lugar. Voy a dejar que salgas, Y no te vayas nunca más. Y que mis ojos brillen siempre Como una copa de cristal. Quizás en el olvido, viva la felicidad. Alma nocturna, no digas no. Huyamos juntos, vos y yo.