Una voz más vieja que las piedras Vuelve en un eco como olas de mar Y trae historias del viento Pero nos cuesta volver a escuchar Un bosque interno dormido Espera solemne su despertar Y llama desde los ojos de animal Volver como humanos a lo elemental Cuidar de los árboles, su memoria Aprender de la diversidad Y sentir el alma llena Y el dolor de su expansión Y el placer de su expansión Volver sobre huellas pisadas Buscar la manada y descansar Sabiendo alimento del alma La unión con un otro como igual Cantarle al instinto salvaje Bailar sobre el fuego vivo ancestral Cantarle a la herencia de sangre Oyendo los cuerpos que piden sanar Cuidar de los árboles, su memoria Aprender de la diversidad Y sentir el alma llena Y el dolor de su expansión Y el poder de su expansión