Santa Milonguita Tenía los ojos Tan grandes y claros Que hacían suspirar Sus labios pecaban De verdes y rojos Y era su mirada Color verdemar Ella que fue siempre Festín y alegría Que en noches de copa Se hartó de champagne Tuvo un bello arranque De sencibleria y quiso ser buena Buena como él pan Redimida por la pasión De un nuevo dueño Mirando al cielo de su vida Encontró más encendida La estrellita de sus sueños Pero un día Cuando el amor más los ataba Golpeó a su puerta rudamente La miseria y crudamente El amor los separó Santa Milonguita Bandeada de penas Por ley del arrullo Volvió al cabaret No tuvo la suerte De esa Magdalena Que con cuatro llantos Volvió a ser mujer Todas las amigas La historia escuchaban De aquella muchacha Que qúiso soñar Y al final del cuento Vieron que lloraban Sus ojos aquellos Color verdemar