Sabes que no miento si amorosamente digo que te quiero. Sabes que no miento cuando te repito que por ti me muero. Es porque no sabes que al pasar coqueta me matás de celos y mis celos sólo dicen, cariñosamente, que te quiero más. Si al llegar la noche, tal vez mirando al cielo, una estrella blanca la ves cruzar en vuelo, y le dio su bendición porque en ella va mi amor. Y en la muerte de la estrella verás morir mi corazón. Dime que algún día, cariñosamente, me dirás que sí. Y verás como en el cielo no habrá más estrellas que mueran por mí. Y la noche nos verá en los brazos del amor, vos temblando de cariño y yo rezando por los dos. Cariñito mío, dame la alegría que alcanzar no puedo. Cariñito mío, dime que me quieres, como yo te quiero. Y no me maltrates al pasar coqueta, que morir no quiero. Que yo, cariñosamente, sólo te repito que te quiero más.