Sube el calor, adentro, somos dos y gana el silencio, se abre el telón y al descubierto vemos latir dos corazones al tiempo; tú que yo, yo que tú si temor que hoy la noche es azul y ha venido a ofrecer protección. déjame entrar, déjame ver, baja la luz para mirarte bien sírvete tú y sírveme hay ciertos besos que despiertan la sed Dulce sabor, eterno, Se contagia en la piel como fuego sin control, sin freno, que arderá mientras nos queme el deseo tú que yo, yo que tú si temor que hoy la noche es azul y ha venido a ofrecer protección. déjame entrar, déjame ver, baja la luz para mirarte bien sírvete tú y sírveme hay ciertos besos que despiertan la sed.