Tom: D D D/C Lo que va a pasar hoy pasó hace tanto Bbmaj7 D/A me desperté diciendo esta mañana, D/C D/F# no vi las predicciones del espanto Bbmaj7 C que le arrancaba al sueño mi palabra. G E/G# En este invierno que pega tan duro D/A A7/Bb está lejos tu boca que me ama Bm F#m y se me desdibuja en el futuro, G A7/Bb y junio me arde rojo aquí en la espalda. En este invierno atroz no hay escenario más duro que esta calle de llovizna; cada uno sigue en ella su calvario pero la cruz de todos es la misma. Salí con las razones de la fiebre y una tristeza absurda como el hambre, y cuando en el corazón la sangre hierve Am D/F# G D/F# es de esperar que se derrame sangre. Em A7 Me llamo con el nombre que me dieron, D/A A7/Bb el que tomó la crónica del día; Bm A7/Bb soy uno de los dos que ya partieron, G A7/Bb los dos en un montón que resistían. D D/C Hermano en la delgada línea roja Am D/F# G D/F# que te me fuiste dos minutos antes Em A7 con la indiscreta muerte que en tu boca D G D/F# entraba en cada casa con tu imagen. Em A7 Yo estaba junto a vos sobre tu grito D G D/F# besándote feroz la indigna muerte Em A7 mientras te ibas volando al infinito D G D/F# fulgor de la mañana indiferente... Em Asus4 A7 fulgor de la mañana indiferente... Yo sé que el corazón que está latiendo en cada uno es una senda pedregosa, cuando en el suelo sucio me estoy yendo, ajeno y solo de todas las cosas. Si yo salí por mí y salí por todos cómo es que ahora no hay nadie aquí a mi lado que me retenga la luz en los ojos, que contenga este río colorado. El corazón del hombre es una senda más áspera que la piedra desnuda; mi extenso corazón es una ofrenda que pierde sangre en esta calle cruda. Yo tengo un nombre rojo de piquete y un apellido muerto de veinte años, y encima las miradas insolentes de los perros oscuros del cadalso. Yo no llevaba un arma entre las manos sino en el franco pecho dolorido, y el pecho es lo que me vieron armado y en el corazón todos los peligros. La mano que me mata no me llega ni al límite más bajo de mi hombría aunque me arrastren rojo en las veredas con una flor abierta a sangre fría. Hoy necesito un canto piquetero que me devuelva la voz silenciada, que me abra por la noche algún sendero pa' que vuelva mi vida enamorada...