El cielo quedó encardido y entonó la palidez Vino griz la tarde fria cuando mi linda partió Mi alma en desabrigo con lejania al mirar Sofrenó la distancia encillada con anhelos La noche y su negro manto, vino sin bordar estrellas La mirada en el espejo me mostró apenas tristeza Alguien se hizo horizonte y puñales de abandono Si unieron al mes de agosto sin yuyos para aliviar Intenté ser de acero pero es inútil querer Cuando en mi pecho tapera no hay fogón para encender El catre serena insonias em caminos de memoria Y mi enponcho de añoranzas de esa morocha historia!