Ay Carmela, me duelen tus ojos Sembrando rastrojos Canela en la nieve Como dos carabelas Tan pintas, tan niñas, tan leves Minifalda Con bici a la espalda Y nariz indiscreta Poco más que decir Urge sobrevivir Te mereces un novio poeta No me pidas que muera por ti Lo que queda de mí Se subasta a la mejor postora Como un parco motín En el barco ruín de la aurora No me obligues a hacerte la ola Sigue sola tu camino Al fin y al cabo ni sé ni sabo Cuánto nos cobra el destino En los bares del foro Rompías el guión De una peli con final feliz No había rubia en el coro Más loro ni más Norma Jean Y después de la feria y el cole La histeria y el miedo Si te da por contar Hombros donde llorar Va a sobrarte una mano y seis dedos No me canso de hablarte Aunque pronto mi voz Suene a grano de arroz repetido Y desampararte es jugar A los fuegos de azar del olvido Nada amanece, todo envejece Plancha tu velo de tul Tal vez mañana a tu ventana Llamé otro príncipe azul Y no sé de qué modo Dejar de adorarte sin duelo Entre nunca y quién sabe Cuando quemes tus naves No me pierdas las llaves del cielo