JAKA ZAHAR BAT Tengo una vieja chaqueta en el armario colgando de su percha. Tan vieja que me envejece con solo mirarla, ni qué decir tiene si me la pongo...me obsequia con cuatro o cinco años, y bueno, un mal menor si al salir a la calle no me encuentro con algún conocido... también él reconocería desde luego la antiguedad de mi chaqueta. En ocasiones he intentado dejarla en alguna silla, al marcharme de un bar, pero siempre ha sido en vano, nadie le presta atención, y al volver a allá el camarero me la trae de nuevo con una sonrisa en los labios. Se la regalaría a gusto a esa gente de buena voluntad que anda por ahí, de puerta en puerta pidiendo ayuda para la gente pobre de lejanas tierras pero ultimamente es que ni esos aparecen por aquí. Después de haber prestado un servicio tan valioso en mi vida, me da pena ahora echarla a la basura, pero debo pensar algo pues estoy decidido a comprarme una nueva y el armario está ya algo justo de sitio