Sentada en un flete más blanco que el mismo
Cintillo que horquilla frenos en flor
Te vi como nunca yo viera ninguna
Mujer de ojos negros tan llenos de amor
Si sos el crucero florido del pozo
Donde hay dos camelias que lloran por vos
Quereme ese día; porteña del alma
Que andás en mis pagos queriendo saber
Como hacen sus nidos de amor las calandrias
Y besan sus picos al atardecer
Vení que te enseño como hacen sus casas
Y empiezan sus trinos al amanecer
Que a veces parecen silbidos de lágrimas
Porque ella no quiere los besos; volver
Si vos me quisieras; un nido yo haría
Donde entren las tibias caricias del Sol
Y enfloren sus bordes las mil madreselvas
Que vengo en el tiempo robándole a Dios
Para hacer la vincha que ciña tu pelo
Si allí en esa gloria me viera con vos
Quereme ese día; que en noches de calma
Cuando ardan los ojos del yaguareté
Y enfilen sus luces por entre los talas
Como un pedrerío; sabes que lo haré
Como son las quejas que dan las guitarras
Como aman los gauchos que saben querer
Y sueltan suspiros que parecen lágrimas
Si son despreciados por una mujer
