Recuerdo que Jaime Molina Cuando estaba borracho ponía esta condición Que, si yo moría primero me hacía un retrato O, si el se moría primero le sacaba un son Ahora prefiero esta condición Que el me hiciera el retrato y no sacarle el son Famosas fueron sus parrandas Que a ningún amigo dejaba dormir Cuando estaba bebiendo Siempre me insultaba Con frases de cariño que sabía decir Después en las piernas me sentaba Me contaba un chiste y se ponía a reír La cosa comenzó muy niño Jaime Molina me enseño a beber A dónde quiera estaba, el estaba conmigo Y donde quiera estaba, estaba yo con él Ahora me duele que se haya ido Yo quedé sin Jaime y el sin Rafael