Cuando nuestras horas parecen minutos Cuando tememos el futuro Por las circunstancias de nuestro pasado Cuando nuestro silencio Es más fuerte que las palabras Y tan solo necesitamos un gesto, una caricia o una mirada Harto de barnizar palabras, harto ya de fingir Tragando saliva, encogiendo mi alma, me ahogo, no puedo seguir Prisionero de mi circunstancia, oír, ver y callar Una cuenta atrás hacia la esperanza que parecía nunca acabar No. No vuelvo a renunciar a mi felicidad Nunca me importó el qué dirán Si quieres vuelo para estar a tu lado una vez más Te doy las gracias por traer la claridad A mi triste realidad, a mi abismal oscuridad A ti jamás yo voy a renunciar La luna hoy sonríe y aclara tu presencia junto a mí Despierto cada noche de madrugada y compruebo que estás aquí Sentimientos que brotan del alma no trates de ocultar Gracias a ti, ya no temo a nada, mil estrellas por ti haré brillar