A Juan de Dios lo mató la mojá de una flamenca envenená. Ni el mismo diablo vino a buscar cuentas por él; ni un perro lloró Y en la pianola de aquel burdel Bambino cantaba canciones de amor prohibido A Juan de Dios nadie le quiso amar ¡del miedo que daba, del miedo que daba! Y amor compraba cuando paró un escalofrío su corazón Y en la pianola de aquel burdel Bambino cantaba canciones de amor prohibido, prohibido Canciones de amor prohibido