Tú vives entre espejos yo me asfixio entre ellos intento involucrarme pero estoy cada vez más lejos, demasiado lejos y casi ajeno a ti. Y sigo inventando historias de diez líneas en ellas yo te llamo en ellas salvo mi vida demasiado larga, y quizás poca para mí. Es igual, no has podido verlo es igual, no vendrás hasta aquí. Pero he perdido ya el temor tocando desde aquí tu puerta me doy cuenta que tengo valor. Si al tocar una guitarra es como tocar tu puerta debe ser que tengo valor.