Has vuelto a la vida y llevado a lo alto, yo pondré el alma y tú los clavos. Desvanecido en la brisa llevó las señas de un vuelo perdido, yo pondré el alma y tú los disparos. Aprisa, aprisa, aprisa. Hay sombras en el agua y un papel en blanco, yo pondré el hacha y tú las manos. Yo pondré la daga y tú el corazón. Aprisa, aprisa, aprisa. He!, he!, he!, he!, he! Vivo dentro de los muros, me desplazo en una y otra, otra dirección. Vivo dentro de los muros y respiro por las grietas de tu habitación. Aprisa, aprisa, aprisa. He!, he!, he!, he!, he! Indice