Dame crack y llámame puta. Dame crack y llámame puta. Te hago lo que quieras por un poco de crack. Ya no tengo pulmones, ya no tengo cerebro, pero tengo boca y manos, y un magnífico trasero. Y trabajo a conciencia por delante y por detrás. Paseo por las sombras dando tumbos con el mono. Por un poco de crack te puedo hacer de todo. Se me ha corrido el rimmel y movido la peluca, ¡cuánta lujuria en una sola puta! Te veo en una esquina dentro de tu gabardina, me apoyo en tu hombro y digo: "chico, estás de suerte, no sabes las cosas que yo podría hacerte". Y me miras y sonríes, pero yo ya estoy muy seria, porque noto tu revólver dentro de mi oreja. Por fin he comprendido que no habrá más crack, y cuando oigo el clik no habrá más crack. Y me pregunto qué se siente cuando dejas de pensar.