Una niña sentada en la playa A la luz de un celeste aclarar Melancólica y triste lloraba El desdén de su ingrato galán Y llorando decía afligida En el mundo no tengo un querer Si supiera el ingrato que le amo Si supiera mi cruel padecer Y sus aires de melancolía Caminaban en alas del viento ay Solo el eco en el mar repetía En mundo no tengo un querer Mas el joven su rumbo seguía En el barco velero a vapor Con destino a la América iba Aquel pobre infeliz trovador Y al mirar la veloz golondrina Como un rayo la altura cruzar Quien pudiera volar se decía Quien pudiera a su lado estar Y pensado en la amada que deja Su lamento de amor falleció ay ay Solo queda una fosa en la tierra Y un cadáver al fondo del mar