Señora Tomasa Cedillo, Primer Callejón Peralvillo número cuarenta, interior veintitrés. Querida Tomasa (dos puntos): El cielo ha querido que juntos vivamos la casa que vi la otra vez. Promesa es promesa y no miento, te tengo ya un apartamiento con agua caliente, dos rentas, fiador. Contrato forzoso de un año, cocina recámara y baño, un poco de sala y su güen comedor.