Calaitos

Se Llamaba Linda

Calaitos


De recién nacida era una bolita de algodón 
Blanca como la nieve y el hocico de carbón 
Fue la reina y la alegría desde el día en que llegó 
Los niños la querían, de corazón 

Al crecer y con el tiempo en la casa fue uno más 
Viendo el telediario se dormía en el sofá 
Les pedía ir de paseo, era toda un huracán 
Lloraba de contenta, de felicidad 

En su mirada de miel se podía leer la ternura, el encanto 
Tan agradecida y leal, tan sólo le faltaba hablar 
Se dejaría la vida por aquella familia sin pedir nada a cambio 
Nada sin ella sería ya igual, se llamaba Linda 

Con los años fue perdiéndose la magia, la ilusión 
Solo fue cuestión de tiempo decidir la solución 
Al llegar las vacaciones no tuvieron compasión 
Y en plena carretera del coche voló 

Magullada y aturdida por un tiempo les siguió 
Hasta que en un despiste la muerte le golpeó 
Una lágrima corría por su rostro de incredulidad 
Y así acabó sus días el pobre animal