Tú eres tú fuerza, eres quien decide No olvides tu sangre, base de tu valor Siempre adelante, sin dejar tu camino Siempre triunfante, muestra tu fulgor Reinado incipiente, es tu profecía Obscura, insidiosa, es tu majestad Tu alma se convierte en cientos de letanías Este es tu legado, la inmortalidad Porque has sido tu quien ha marchado triunfante Y todo lo que miras te pertenece No dejes que mentiras infecten tu sangre No dejes que el engaño invada tu fe Sigue implacable, avasallante, adelante Implacable, no dejes que se rinda tu ser Lucha, por tu sangre, por tu tierra, por tu historia Por tu gloria, no dejes tu alma desvanecer En el libro de tu historia no hay palabras cobardes Todo lo necesario en tu ser lo tienes No dejes que mentiras infecten tu sangre No dejes que el engaño invada tu fe