Tus palabras me erizan la piel En la forma en que me hablas En el ruido de tu voz La distancia de tus labios Nunca apagues tu voz Nunca apagues tu voz Mi cuerpo no resiste Mi alma se hace agua Si intentas una conversación Recogeme en el sol Rompes el silencio en mi ser Tus palabras son como el agua Que refrescan mi ansiedad Que curan las heridas del alma Nunca apagues tu voz Déjame escucharte