Quién eres tú repentina Doncella que te desplomas Como la araña que pende Del pétalo de una rosa Tu cuerpo relampaguea Entre las maduras pomas Que el aire caliente Arranca del árbol de la centolla Caes con el sol, esclava Dorada de la amapola Y lloras entre los brazos Del hombre que te deshoja ¿Eres mujer o eres dios Muchacha que te incorporas Como una nueva Afrodita Del fondo de una corola? Herida en lo más profundo Del cáliz, te desenrollas Gimes de placer, te estiras Te rompes como una copa Mujer parecida al mar -Violada entre ola y ola- Eres más ardiente aún Que un cielo de nubes rojas La mesa está puesta, muerde La uva que te trastorna Y besa con ira el duro Cristal que te vuelve loca