Hoy puedo hablarte A través de los objetos Que hicieron de ti un recuerdo Firme, inmóvil, enraizado. Hoy puedo hablarte Al descubrir en un mapa Algo que se te asemeje: Un río, un país, un valle. Fuiste sencillamente algún Pedazo de mar Que se quedó rezagado, A lo mejor fuiste arena. Fuiste de arriba a abajo Un enorme pedestal Donde descanso mi ruta; A lo mejor fuiste un ruido. Fuiste un tramo de avenida, Fuiste una sonrisa a tiempo, Fuiste concierto, y también Trescientos mil girasoles. Perdóname, Recuerdo, si te me pierdes: No llores, que volveremos A encontrarnos algún día, En alguna melodía, En un sello de correos En un tramo de mañana En un color, en un gesto, En una moneda antigua. Perdóname, Recuerdo, si te fragmentas: Hasta luego, hasta mañana, Hasta el siglo diecinueve, O hasta el próximo segundo.