Del polvo fuimos hechos y en polvo terminaremos, derramó toda su sangre por todas nuestras falsedades. A fariseos y escribas les mostró sus hipocresías, todos lo señalaban porque la verdad predicaba. Vilmente fue traicionado, entregado y crucificado, mas nunca se ha vengado pues siempre nos ha perdonado. Hoy tenemos que buscarlo, el mundo se cae a pedazos, pronto El regresará para el Juicio Final.