Ese hombre Que me enseñó a tomar lo bueno de la vida Que me dejó momentos que jamás se olvidan Ese hombre Que yo admiraba y con orgullo yo seguía Ese hombre Que me enseñó a ver el mundo sin mentiras A cómo afrontar esas cuestiones de la vida Que causan penas Y a disfrutar las que nos traen alegría Como recuerdo aquellos fines de semana Que lo miraba, cómo la vida celebraba Y nos llamaba y aconsejaba Sabía siempre qué decir cuando él hablaba Y hoy que no está Me quedan los recuerdos de su andar Y las luz de sus consejos para caminar Que me dan fuerzas y me ayudan para continuar Y hoy que no está Yo me quedo con lo bueno de la vida Las vivencias, las lecciones aprendidas Porque ese hombre, era un hombre de verdad Recuerdo aquellos fines de semana Que lo miraba, cómo la vida celebraba Y nos llamaba y aconsejaba Sabía siempre que decir cuando él hablaba Y hoy que no está Me quedan los recuerdos de su andar Y la luz de sus consejos para caminar Que me dan fuerzas para continuar Y hoy que no está Yo me quedo con lo bueno de la vida Las vivencias, las lecciones aprendidas Porque ese hombre, era un hombre de verdad Porque mi padre, era un hombre de verdad