"Madrugada, ya vendrás con tu dolor" Lamento del milonga de aquél que fatalmente se lava, reina noche, con tu grela el corazón. Ya bosteza el comienzo del día la resaca ya vuelve del viaje ya los ecos del viejo festín cabeceando se toman el raje. Si es verdad que en absurdas mañanas han sufrido las mismas heridas esos hombres que viven al sol y lastiman de llanto los días... Mejor será en tus brazos, reina noche, abrazados a tu fuego y por tu fuego, madre oscura Mejor será en tus palcos, perra negra Hembra turbia, yegua loca, reina vieja, compañera pa' soportar mejor el tarascazo del dolor Bailamos en tus aguas imposibles y en la miel de tus ojeras escabiamos de tu sangre Y en el humo respiramos de tu luz Ay ¿por qué serás tan honda tan fugaz tu solo resplandor? Por los surcos que han abierto las leyendas de otras noches brilla y ríe desdentada tu canción. Y al escuchar tu tango tan dulce que lastima se duele reina noche el mismo puerto en otro mar. Alguien hunde su cara en la sombra Alguien llora frente a una pantalla Alguien alza su copa de luz Alguien compra el dolor que lo nombra Otra vez el rugido en el pecho Otra vez esta luna embarrada Otra vez el regreso al bulín Se abrirá frente a la encrucijada: "Madrugada, ya vendrás con tu dolor"